PARA MAYORES Y JÓVENES
Una cooperativa busca suelo en Valencia para construir viviendas colaborativas
VALÈNCIA. La cooperativa valenciana Resistir busca un solar en el área metropolitana de Valencia en donde poder levantar su proyecto de viviendas colaborativas dirigidas a personas mayores y jóvenes a través de la autogestión.
La vivienda colaborativa, también conocida como coviviendas o cohousing, es un modelo que fomenta la idea de vivir en comunidad y la ayuda mutua entre vecinos compartiendo servicios. Además, son los propios residentes los que definen el diseño según su forma de vida y necesidades. Se trata de un sistema muy extendido en Europa y EEUU, especialmente como alternativa a las tradicionales residencias para la tercera edad.
De hecho, con la finalidad de ofrecer una solución habitacional a personas mayores de 55 años, nació en 2016 Resistir. Sin embargo, en este tiempo la cooperativa cambió sus estatutos para que también pudieran acceder gente joven. «Nos dimos cuenta de que la relación intergeneracional es positiva», explica su presidente, Martín García.
El objetivo es «vivir en un ambiente de colaboración y cooperación en el que cuando uno de los vecinos tenga alguna necesidad el resto de la comunidad ayude». Detalla que con este modelo el residente no es el propietario del inmueble, que es propiedad de la cooperativa. Para ello, los socios depositan una entrada y pagan una cuota mensual por su uso, en este caso de entre 250-350 euros.
En un principio, barajaron la zona del Cabanyal para proyectar su iniciativa residencial para lo que contactaron con el Ayuntamiento de València para una cesión de uso de terrenos, pero finalmente no prosperó. También lo intentaron en otras zonas de la ciudad con poco éxito. Por ello, ahora buscan suelo en localidades próximas al área metropolitana de Valencia que, además, cuenten con buenas conexiones de metro.
El complejo residencial está compuesto por viviendas de entre 40 y 50 metros cuadrados con una o dos habitaciones, comedor, cocina y baño y una planta baja destinada a prestar servicios comunitarios como cursos de yoga, actividades sociales y comedor. Eso sí, el número de inmuebles es una incógnita porque «dependerá de la superficie del solar», señala García, que precisa que será una construcción sostenible y eficiente. Actualmente, cuentan con 40 socios y un acuerdo para la financiación con Triodos Bank.